lunes, 31 de marzo de 2008

De Cuando los Ángeles Vuelven Al Cielo.

Esta, más que una historia propia, más que un comentario y opinión sobre un tema, es la historia de un ángel, que estuvo entre nosotros y volvió al cielo.
Hace cuatro (4) años, en mi familia, yo no era la única en estado de gravidez. Mi hermana también se encontraba ya en su segundo embarazo, y a esta fecha estaba casi a pocas semanas de traer al mundo a mi segunda sobrina. Estabamos a una diferencia de seis (6) meses entre ambos embarazos.
Sin embargo la vida, nos traería más que una felicidad de ir llenando la casa de niños.
A mediados de abril, una mañana de domingo, mi hermana no sintió movimiento alguno en su vientre y decidió ir al Hospital a ver qué sucedía.
Lo peor que pudo haber ocurrido, a cualquier persona, se lo comunicaban sin anestesia ni ética alguna. Su hija, de término, había fallecido en su vientre. Hicieron los trámites convenientes para realizarle una cesarea, una acción urgente, teniendo en cuenta que cabía la posibilidad de que se produjera una infección en sus entrañas.
Después de sacarla del vientre y de que un ministro - el abuelo paterno - diera su bendición y alguna que otra palabra de consuelo y compasión, su padre entró a despedirse de ella, así como la abuela materna, y no se cuanta gente más.
A estas alturas, yo ya sabía la situación, y me sentía sumamente angustiada, y teniendo en cuenta que yo también estaba embarazada, no me dejaban llorar, por la posibilidad de que la tensión vivida me trajera algún problema en mi estado, además de que por mi mente pasaba la horrible idea de que mi hermana me iba a odiar por la situación de que ella había perdido a su bebé, y yo, no.
Fue puesta en un ataud muy pequeño, vestida por mi madre con un lindo osito y su gorrito -Dice mi madre que parecía dormir, cuando al intentar poner una de las piezas del ajuar, se la tuvo que apoyar en el hombro -. ella la lloró con mucha pena, pues había sufrido una perdida muy parecida, hace muchísimo tiempo atrás, antes que yo hiciera idea de aparecer en el mundo.
Fue velada en una iglesia, cerca de la casa, donde se le entregaron muestras de amor enormes, a pesar de que no nació viva, ni nadie la tuvo en brazos ni le cantó canciones de cuna. Fue sepultada y se le dieron todas las muestras de afecto posibles.
Estas líneas son para mi ángel, que partió de vuelta al cielo, antes de regalarnos su amor, sus sonrisas y su calor:
"Sé que cuidas a tu madre, se que amas a tu hermana, y desde el cielo las miras, y las guías en este mundo cruel. Fuiste vida en un vientre, golpes en la barriga. No alcanzaste a conocer la vida fuera de la capsula biológica que te ofreció tu madre. Un día de abril, abriste tus alas, y tu alma volvió del lugar que vino. Quizás no era el momento. Quizás tuviste miedo. Un día en abril, volviste al cielo. Te quiero, siempre"
Hay una canción, que me parte el alma escuchar, que habla del dolor que causa, cuando uno de estos ángeles, decide volver...Aquí se las dejo.
Espero no haberlos aburrido, lo único que pretendía, era decir, que el dolor de un padre y una madre - y su hermana -, por la perdida de un hijo, sólo puede ser imaginable, por los que tenemos la dicha de tener entre nosotros a los propios hijo.
"Ayleen...de aquí al cielo, sólo una abrazo, sólo el amor"

5 comentarios:

DE LA MANO DE TERESA DE JESUS dijo...

Es un hermoso testimonio y gesto de recordar y valorar la vida especialmente en estos tiempos en los cuales no dejan nacer a los angelitos que podrian hacerlo y estar entre nosotros.

Seguro que tu angelito vela por su mama y su familia.

Un abrazo.

Oscár dijo...

al contrario hermana, al contrario, es una hermosa narración de un testimonio lleno de amor. Gracias por compartirlo.

Anónimo dijo...

No conocía esta historia, amiga...bastante conmovedora, por lo demás; aunque, con todo respeto, no sé con qué clase de anestesia se puede comunicar tan triste noticia atendiendo que se debía de realizar una acción médica urgente.

Expresar sentimientos jamás aburre...al contrario, honra que quieras compartir esta experiencia con nosotros tus lectores. Saludos cordiales.

Anónimo dijo...

Y la canción es hermosa...intensa, con sentimiento. Baglieto puede quedarse tranquilo con esta melodía. Saludos cordiales.

Sailorpelusona dijo...

Dela mano de Teresa de Jesús: Es la esperanza en la vida después de la vida y la fé que nos entrega el amor, el que me olbiga - y felizmente - a pensar que desde allá. nos cuidan todos los querubines. Besitos.

Oscár: No hay por qué. Las experiencias de vida, y también las de muerte, nos hacen llevar una mejor vida. Aprendemos de llas, siempre. Besotes!

Luis Alejandro Lindo: Pueden haber mejores palabras, mas sabias. Tu sabes que las palabras ayudan bastante a pasar los momentos duros. Gracias por no aburrirse y comprender. La canción elegida y expuesta, me hace llorar hasta las orejas. Besitos melosos.